Jimmy Johnson: el Contrabajo
de los Pioneros del Jazz
Entre los nombres de los pioneros del jazz, muchos músicos pasaron
desapercibidos en los libros de historia, pero fueron cruciales en la
construcción del sonido que conocemos hoy. Uno de estos personajes clave fue
Jimmy Johnson, un contrabajista que compartió escenarios con grandes figuras y
fue testigo del nacimiento del jazz en Nueva Orleans. La trayectoria de Johnson
es fascinante no solo por su talento, sino por la cantidad de innovaciones que
ayudó a moldear en una época en que el jazz apenas se estaba formando.
Jimmy Johnson comenzó a destacar en la escena musical de Nueva Orleans como
el contrabajista en la banda de Buddy Bolden, una de las primeras figuras
reconocidas en el jazz. Bolden es famoso por su capacidad para fusionar el
blues, el ragtime y otros estilos afroamericanos en algo completamente nuevo.
Johnson, con su bajo firme y rítmico, era una pieza fundamental en la sección
rítmica de Bolden, proporcionando el soporte necesario para que el trombón, la
corneta y otros instrumentos pudieran explorar nuevas ideas sonoras.
Este periodo con Bolden fue clave para Johnson, quien no solo mejoró su
técnica, sino que también absorbió los elementos que harían del jazz una
expresión musical única: la improvisación, el swing y la fusión de tradiciones
musicales africanas y americanas. Aunque Buddy Bolden no grabó ninguna canción,
los músicos de su banda difundieron su estilo, y Johnson fue uno de ellos.
En 1907, Johnson se unió a la Crescent Band, liderada por el trombonista
Jack Carey. Esta banda era popular en los desfiles y los bailes callejeros de
Nueva Orleans, y el contrabajo de Johnson daba un impulso rítmico que hacía
vibrar al público. En 1911, se unió a otra formación prominente: la Silver Leaf
Orchestra. Esta banda, conocida por sus presentaciones tanto en clubes como en
fiestas privadas, le dio a Johnson la oportunidad de tocar con músicos
experimentados y de refinar su estilo.
Ambas experiencias consolidaron a Johnson como un bajista versátil y
confiable en la escena de Nueva Orleans. En ese momento, el contrabajo no tenía
la visibilidad de otros instrumentos en el jazz, pero Johnson lograba que su
presencia rítmica fuera indiscutible y esencial en cada actuación.
En 1927, Manuel Perez, otro pionero del jazz, reclutó a Johnson para su
orquesta, la Manuel Perez’s Garden of Joy Orchestra. Pérez, reconocido como un
talentoso corneta y líder de banda, llevó su orquesta a los famosos barcos
fluviales del Mississippi. En estos barcos, conocidos como riverboats, el jazz
encontraba un nuevo hogar, ya que ofrecían entretenimiento a turistas y
lugareños, difundiendo la música más allá de las calles de Nueva Orleans.
Johnson se destacó en esta etapa de su vida por su capacidad para adaptarse
a un repertorio que, además de jazz, incluía estándares de la música popular de
la época. En un contexto donde la improvisación era aplaudida pero las
expectativas del público eran altas, Johnson demostró su habilidad para
mantener el ritmo y el swing sin perder la esencia de cada canción. La vida en
los riverboats también brindaba un estilo de vida nómada y estimulante, con
presentaciones cada noche y el público cambiando constantemente. Este ambiente
desafiante ayudó a fortalecer su reputación como un bajista confiable y
creativo.
En 1931, Jimmy Johnson se unió a la Don Albert Orchestra, una banda con
sede en San Antonio, Texas, que se perfilaba como una de las orquestas más
importantes del sur de los Estados Unidos. Don Albert, un trompetista de gran
talento, tenía una visión ambiciosa para su orquesta, y Johnson era un elemento
clave en esa visión. La banda realizó giras extensivas por el país, llevando el
jazz a audiencias nuevas y contribuyendo a la expansión del género.
Tristemente, mientras estaba de gira con la Don Albert Orchestra en 1937,
Jimmy Johnson falleció en Mobile, Alabama, a causa de insuficiencia renal. Su
muerte marcó el fin de una carrera que había sido, en gran medida, una vida
dedicada a tocar y compartir el jazz. La figura de Johnson puede parecer menor
en comparación con las de otros músicos de su época, pero fue fundamental en el
desarrollo del contrabajo en el jazz y en la consolidación del estilo de Nueva
Orleans.
Aunque Jimmy Johnson no alcanzó la fama de otros músicos de su tiempo, su
trabajo y dedicación representa a esos artistas que, aunque no grabaron discos
ni recibieron grandes honores en vida, fueron esenciales en la construcción de
un sonido que luego se convertiría en un fenómeno global. Johnson fue, en
muchos sentidos, la columna vertebral de las bandas que formó parte, y su
estilo contribuyó a la evolución del contrabajo en el jazz, consolidándolo como
un instrumento rítmico y melódico esencial.
Fuentes : Jazz: A History of
America’s Music de Geoffrey C. Ward y
Ken Burns .The New Orleans Jazz Scene, 1970-2000 de Thomas W. Jacobsen ofrecen
contexto sobre el desarrollo de la escena de jazz en Nueva Orleans y los músicos
que la protagonizaron. Libros que
examinan la vida de músicos de la época de Buddy Bolden y Manuel Perez, como Buddy
Bolden and the Birth of Jazz de Don Marquis, exploran las conexiones y
colaboraciones entre estos músicos.